En el Marco del acompañamiento familiar y comunitario de la Red Unidos en el municipio de Ciénaga de Oro-Córdoba, se viene desarrollando el proyecto de Huertas Comunitarias que beneficia a 160 familias, 600 personas en situación de pobreza extrema, distribuidas en 4 zonas; Zona Urbana con sede en el barrio Julio Manzur, en la Zona rural corregimiento de Pijiguayal, Vereda las Balsas y Vereda Bruselas, la cual se dio inició en el mes de julio de 2012.
El objetivo es implementar los cultivos de hortalizas en huertas comunitarias mediante los sistemas de producción en reatas y patios – cultivos con bancos de semillas para replicar en todas las familias de la Red Unidos del municipio, implicando que todos los actores involucrados, particularmente las familias beneficiarias, consuman hortalizas para satisfacer en gran parte las necesidades alimenticias y fomentar la comercialización de los productos agrícolas para así generar sus propios ingresos convirtiéndose en familias autosostenibles y por ende, propiciar una buena nutrición balanceada e incentivar la cultura de ahorro.
Se convocó a las familias a través de sesiones comunitarias donde se explicó la importancia de los proyectos productivos. En los encuentros las familias manifestaron que en sus casas cuentan con patios extensos, pero, no los utilizan; es allí donde nace la iniciativa de concientizar a dichas familias para que aprovechen los patios que tienen, convirtiéndolos en terrenos productivos. En el desarrollo de las sesiones se observó la actitud positiva de las familias y esa fue nuestra mayor motivación para la ejecución del proyecto, ya que tienen espíritu de emprendimiento y liderazgo para llevar a cabo este proceso. Sin embargo, hubo familias que no participaron de la experiencia por falta de tiempo, por vivir muy distantes donde se está elaborando el proyecto.
Además, la experiencia de huerta comunitaria, significará la construcción de espacios concretos de formación, capacitación y de trabajo, que fortalezcan redes comunitarias y promuevan la autonomía de quienes participan en ellos. El proyecto fundamentalmente es de integración. El aprendizaje compartido en un hacer común puede contribuir a reforzar y mejorar vínculos familiares. Mediante las sesiones comunitarias han reconocido sus potenciales, valorando la importancia de interactuar con la comunidad.
Esta experiencia nos ha permitido abordar las dimensiones de ingreso y trabajo, nutrición, dinámica familiar y bancarización y ahorro, promoviendo los logros 6, 7, 21, 22, 36, 40.
El proyecto se ha realizado en las siguientes fases:
Fase 1: Capacitación y orientación de las familias beneficiadas de la Red Unidos sobre el proyecto de cultivadores de hortalizas a través del SENA.
Fase 2: Reconocimiento de los terrenos por parte del instructor donde se encuentran actualmente los semilleros y viveros, los cuales constan de berenjena, habichuelas, ají, espinaca, batata, rábano, pimentón, tomate, pepino cohombro, cebollín, cilantro, col y calabaza.
Fase 3: Elaboración de los surcos y sustratos para la siembra.
Fase 4: Siembra de semillas y raleo de viveros en las cuales nos encontramos actualmente ya que hemos contado con la articulación del SENA que es la entidad que aporta todos los insumos con los cuales podemos realizar esta gran actividad y tener una buena producción de hortalizas que le permitirá a las familias competir en el mercado.
La propuesta es liderada por la Coordinadora Local, Doctora Carmenza Esquivia y los cogestores sociales Ingrid Yances Barón, Marelbis Pacheco Acosta, Monica Bascarán Fuentes, Ivis Romero Coronado, Derly Marsiglia Pacheco, Carmen Castillo Negrette y Primavera Barón Naranjo.
En el Marco del
acompañamiento familiar y comunitario de la Red Unidos en el municipio de
Ciénaga de Oro-Córdoba, se viene desarrollando el proyecto de Huertas
Comunitarias que beneficia a 160 familias, 600 personas en situación de pobreza
extrema, distribuidas en 4 zonas; Zona Urbana con sede en el barrio Julio
Manzur, en la Zona rural corregimiento de Pijiguayal, Vereda las Balsas y Vereda
Bruselas, la cual se dio inició en el mes de julio de 2012.
El objetivo es implementar
los cultivos de hortalizas en huertas
comunitarias mediante los sistemas de producción en reatas y patios – cultivos
con bancos de semillas para replicar en
todas las familias de la Red Unidos del municipio, implicando que todos los
actores involucrados, particularmente las familias beneficiarias, consuman
hortalizas para satisfacer en gran parte las necesidades alimenticias y fomentar
la comercialización de los productos agrícolas para así generar sus propios
ingresos convirtiéndose en familias autosostenibles y por ende, propiciar una
buena nutrición balanceada e incentivar la cultura de ahorro.
Se convocó a las
familias a través de sesiones comunitarias donde se explicó la importancia de
los proyectos productivos. En los
encuentros las familias manifestaron que en sus casas cuentan con patios
extensos, pero, no los utilizan; es allí donde nace la iniciativa de
concientizar a dichas familias para que aprovechen los patios que tienen, convirtiéndolos en
terrenos productivos. En el desarrollo de las sesiones se observó la actitud
positiva de las familias y esa fue
nuestra mayor motivación para la ejecución del proyecto, ya que tienen espíritu de emprendimiento y
liderazgo para llevar a cabo este proceso. Sin embargo, hubo familias que no
participaron de la experiencia por falta de tiempo, por vivir muy distantes
donde se está elaborando el proyecto.
Además, la experiencia
de huerta comunitaria, significará la construcción de espacios concretos de
formación, capacitación y de trabajo, que fortalezcan redes comunitarias y
promuevan la autonomía de quienes participan en ellos. El proyecto
fundamentalmente es de integración. El aprendizaje compartido en un hacer común
puede contribuir a reforzar y mejorar vínculos familiares. Mediante
las sesiones comunitarias han reconocido sus potenciales, valorando la
importancia de interactuar con la comunidad.
Esta experiencia
nos ha permitido abordar las dimensiones de ingreso y trabajo, nutrición, dinámica
familiar y bancarización y ahorro, promoviendo los logros 6, 7, 21, 22, 36, 40.
El proyecto se ha realizado en las siguientes fases:
Fase 1: Capacitación y
orientación de las familias beneficiadas de la Red Unidos sobre el proyecto de
cultivadores de hortalizas a través del SENA.
Fase 2: Reconocimiento de
los terrenos por parte del instructor donde se encuentran actualmente los
semilleros y viveros, los cuales constan de berenjena, habichuelas, ají,
espinaca, batata, rábano, pimentón, tomate, pepino cohombro, cebollín,
cilantro, col y calabaza.
Fase 3: Elaboración de los
surcos y sustratos para la siembra.
Fase 4: Siembra de
semillas y raleo de viveros en las cuales nos encontramos actualmente ya que
hemos contado con la articulación del
SENA que es la entidad que aporta todos los insumos con los cuales podemos
realizar esta gran actividad y tener una buena producción de hortalizas que le permitirá a las familias
competir en el mercado.
La propuesta es
liderada por la Coordinadora Local, Doctora Carmenza Esquivia y los cogestores
sociales Ingrid Yances Barón, Marelbis Pacheco Acosta, Monica Bascarán Fuentes,
Ivis Romero Coronado, Derly Marsiglia
Pacheco, Carmen Castillo Negrette y Primavera Barón Naranjo.
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